Sólo piensas en ella y no se te ocurre nada más.
Piensas en su sonrisa, sus ojos, su belleza, su forma de hablar.
Y cada día te vas enamorando más, más y mucho más.
La miras todo el día y esperas que te mire ella a ti...
Te echa una mirada y el mundo se ilumina para ti.
Sus ojos perfectos se clavaron en ti,
no vas a olvidar esa sensación que te hizo tan feliz.
Ahora esperas que te venga a saludar...
esperas y esperas ese momento que seguro pronto llegará. (L)
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